No sólo el parque inmobiliario de Bilbao es antiguo, también es preciso actualizar la normativa que regula su conservación, reparación y rehabilitación. La junta de gobierno del ayuntamiento de Bilbao ha aprobado adaptar la ordenanza a la situación concreta de la villa haciendo un especial hincapié en la calidad que debe de cumplir la revisión de los edificios. En 2016 cerca de 1.300 edificios de más de 50 años deberán de presentar la Inspección técnica de edificios (ITE). Además, a finales de mayo se cumple el plazo para 133 comunidades que debían pasar la inspección en 2015 y a las que el ayuntamiento concedió una prorroga.

El proyecto de la nueva ordenanza de conservación estará abierto a las aportaciones de la ciudadanía y de los grupos municipales hasta el próximo 3 de junio. Cumplido este proceso, se presentará para su aprobación en el pleno de ese mismo mes. La nueva ordenanza muestra especial atención a la normativa autonómica en materia de ITE y hace especial hincapié en los documentos que avalan la revisión de esta inspección.

La obligatoriedad de presentar la ITE corresponde a la propiedad de los edificios y debe de contener una descripción general del estado de los elementos que componen la edificación: estructura, cimentación, fachadas, cubiertas e instalaciones; además de incluir en el listado el listado de obras necesarias para la reparación de las deficiencias observadas, en el caso de haberlas, indicando la mayor o menor urgencia de las mismas teniendo en cuenta su gravedad. Además, dicho documento debe de completarse con un informe sobre accesibilidad y un certificado de eficiencia energética del inmueble y solo puede ser realizado por personal técnico con titulación en arquitectura superior o técnica.La ITE se debe de presentar en el ayuntamiento para que este la remita al departamento de vivienda del Gobierno Vasco.  

En el caso de comunidades incumplidoras, se podrían enfrentar a sanciones o multas que en la normativa se clasifican según la tipología de la reparación necesaria. Así, en la ley de Vivienda de 2015, tanto la no presentación de la ITE como el incumplimiento de la realización de la orden de ejecución de las obras, se consideran infracciones graves, para las que se prevén sanciones de entre 3.001 y 20.000 euros. En la ley de Suelo y Urbanismo de 2006, la no ejecución de las obras ordenadas también se consideraba grave y la sanción oscila entre los 5.001 y los 50.000 euros. Con independencia de las sanciones propiamente dichas, ambas leyes contemplan multas coercitivas dirigidas a forzar el cumplimiento de las ordenes municipales con sanciones de hasta 600 euros.

Otro de los aspectos que se modifican con respecto a la anterior ordenanza son los baremos de ruinas diferenciando entre los edificios integrales o aislados.

 Finalmente, se informa que el 60% de los edificios de la villa estarán sujetos a esta nueva ordenanza. Cerca de 1.300 edificios residenciales de Bilbao con más de 50 años de antigüedad deberán realizar la ITE durante 2016 y, de acuerdo con el calendario municipal, antes de 2018, están obligados a pasarla 7.027 inmuebles más.